Los armarios situados bajo el fregadero de la cocina, o el cuarto de baño, son algunos ejemplos de los lugares en donde los niños pueden verse en apuros ó lastimarse. Este sistema de bloqueo evita que los niños abran las puertas. No se necesita herramientas y es fácil de instalar y usar por adultos.
El sistema del cierre en ángulo impide que los niños puedan abrir cajones o armarios. Puede también utilizarse frigoríficos, congeladores, etc.